Qué hay de esos días en los que todo parece ir tomando forma y de repente zasssss llega alguna situación y te enfrenta a lo que tanto temías? a parte te lleva al lugar donde te habías propuesto no volver a estar?
Pués si, para mí esta última semana ha sido de esos días por los que hace tiempo no pasaba, donde tengo que decidir si tengo para comer o para arreglar el carro que me ayuda a realizar una de mis formas de ingreso, donde he tenido que pedir plazo para pagar ya que no he podido hacerlo a tiempo, donde tuve que pagar con monedas en el supermercado para poder que me alcanzara y llevar alimento al hogar, donde mis lágrimas salian sin querer detenerse, empezar a pedir a la divinidad que pudiera llegar a la casa, recoger a mi hija en la escuela sin que el carro fuera a fallar, que lo que tiene no cueste tanto porque no tengo con que cubrirlo, donde abrí una puerta y se me cerraron tres, donde tuve que parquear y derrumbarme en el timón a llorar para poder sacar toda esa frustración, esa tristeza, esa rabia y poder pensar con cabeza fría que hacer. Observar a mi cuerpo manifestarse ante semejante stress con gastritis, frío, dolor de cabeza, respirar volver a mi centro y decirle que todo va a estar bien para que se calmara al igual que a la mente.
A la vez preguntarme para que me esta volviendo a pasar, que no he aprendido, que estoy evitando, que estoy bloqueando, que más tengo que hacer para salir de este camino que por momentos parece alejarse y por otros lo vuelvo a ver muy de cerca. Me pregunto será que estoy en la zona de víctima? y al mismo tiempo me respondo NO porque estas accionando, estas encontrando nuevas formas de ingreso, porque estas derrumbando tus creencias limitantes, porque te estas arriesgando, porque estas trabajando con pasión y determinación en lo que tanto quieres, porque no siempre tienes que ser la fuerte, la todo lo puede, la invencible, también necesitas soltar, necesitas desahogarte y lo más importante debes de aprender a pedir ayuda, no te puedes ahogar porque decidiste venir a este mundo a hacer grandes cosas, cada día sientes más este llamado a vivir, experimentar, aprender y compartir este camino de Reconexión.
Así que si te ha pasado, estas pasando por esto dejame decirte que todo pasa, si hay solución, exterioriza, saca todos esos bloqueos, tomate unos minutos para estar en silencio, para aquietar la mente, para pedirle a la divinidad que te ilumine, que te guíe y sobretodo que escuches más a la voz de tu intuición que a la voz de tu ego.
Pedir ayuda no esta mal, es la valentía de reconocer que no puedes sol@ en esta situación. Aquí estoy por si me necesitas, un gran abrazo de LUZ.